CHARLES FREDERICK WORTH
(13 OCTUBRE 1826/ 10 MARZO 1895)
Considerado el padre de la Alta Costura, nació el 13 de Octubre de 1826 en Bourne (Lincolnshire), en el seno de una familia acomodada. Su padre, William Worth, abogado, se arruinaría a causa del juego, siendo este el motivo por el que Worth tuviese que trabajar desde temprana edad. Empezó trabajando en Londres en Swan & Edgar, una casa de tejidos y complementos del vestir, revelándose como un extraordinario vendedor. Worth frecuentaba asiduamente la National Gallery y otras colecciones de arte para estudiar los retratos y sus vestidos, lo que más tarde serviría a su inspiración.
A los 20 años, viajó a París, trabajando allí como vendedor en la Maison Gagelin, la casa francesa de tejidos más importante de la época que, además, vendía todo tipo de artículos para la moda femenina. Allí conoció a Marie Vernet , una de las vendedoras, con la que más tarde se casaría. Además de vender, Worth empezó a diseñar los vestidos de su prometida, quien los lucía en la tienda, siendo pronto remarcados por las clientas, que empezaron a demandarlos. Tal fue el éxito, que, en 1851, Worth empezó a dirigir una pequeña sección de costura a medida en Gagelin. Ese mismo año, Worth recibió la única medalla de oro concedida a Francia en la Exposición Universal de Londres, siendo nuevamente premiado en la de París de 1855.
En 1858, gracias a la ayuda de Otto Bobergh, decidió independizarse, abriendo una maison de couture -Worth et Bobergh- en el 7, rue de la Paix, una calle que, gracias a él, se convertiría en el epicentro de la elegancia parisina.
En 1859 Worth se convirtió en proveedor oficial de la Corte francesa, alcanzando así fama internacional y convirtiéndose también en el couturier de todas las casas reales europeas, la alta sociedad y reputadas actrices como Sarah Bernhardt, Lillie Langtry y Eleonora Duse.
El inicio del éxito de Worth como creador de moda coincidió con la implantación del Segundo Imperio en Francia, que supuso la restauración de la monarquía en 1852 con Napoleón III como emperador, que convirtió París en el escaparate de una lujosa vida social.
Lower skirt of this dress
Lower skirt of this dress
Lower skirt of this dress
Colección vestidos de noche 1880-1890
CHARLES FREDERICK WORTH
The Metropolitan Museum of Art
Hasta entonces, sastres y costureras, mayoritariamente anónimos, trabajaban a las órdenes de las clientas, quienes les proporcionaban tanto las ideas como los tejidos, sin importar el aporte creativo de los mismos. Worth, invirtió los roles. A partir de entonces el couturier impondrá sus creaciones, concebidas de antemano con tejidos y adornos de su elección, que mostrará a sus clientas, quienes se limitarán a escoger los modelos para hacérselos ajustar a sus medidas. Worth fue el primero que impuso su propio gusto a las mujeres, convirtiéndose en el prototipo contemporáneo de creador de moda.
Convirtiendose en un genio del marketing avant la lettre y habiendo concebido de una nueva manera la moda, creó una nueva manera de comunicarla: los desfiles de moda. Antes, los vestidos se mostraban sobre bustos de madera, y Worth fue el primero en concebir la moda como espectáculo, invitando a las clientas a sus salones, lujosamente decorados, mientras hacía desfilar una serie de jóvenes atractivas -las llamadas sosías o dobles porque debían tener el tipo físico que correspondía al de las clientas-, vestidas con sus creaciones, naciendo así el concepto de modelo.
Con Worth la moda se convirtió en una empresa de creación y de espectáculo publicitario, y en el motor de las novedades. El couturier, después de siglos de anonimato, se convirtió en un artista moderno cuya ley imperativa era la innovación. Worth reivindicó la libertad creativa en la moda, pretendiéndose artista (“Yo soy un artista. Un vestido vale lo que un cuadro”), y, por esa razón, fue el primero en firmar sus creaciones, poniendo una etiqueta con su nombre a los vestidos y creando, de paso, la venta de intangibles. Fue pionero en comprender que la moda vendía también un imaginario, y que ese valor añadido deseable debía hacerse pagar… caro.
A causa de la guerra franco-prusiana Worth y Bobergh debieron cerrar su establecimiento. En 1871, acabado el conflicto, Worth volvió a abrir como la Maison Worth, ya sin Bobergh, incorporando a sus hijos Gaston y Jean-Philippe al negocio.
Worth murió en París el 10 de Marzo de 1895. A su muerte, sus hijos continuaron con la empresa, y Gaston se implicó activamente en el nacimiento, en 1868, de la Chambre Syndicale de la Couture parisienne que, hacia 1880, bajo su liderazgo, se convirtió en la Chambre Syndicale de la Couture Française, organismo destinado a regular el funcionamiento de las casas de alta costura. La maison Worth prosperó hasta los años Veinte, empezando después su declive. A los hijos de Worth les sucedieron sus nietos, Jacques y Jean-Charles.
La casa Worth cerró definitivamente sus puertas en 1956.
Charles Worth and in this dress here to its original owner.